Los sistemas aislados, las preferencias obsoletas de los clientes, los datos de comportamiento con retraso y las experiencias inconexas dan como resultado ventas perdidas, un menor valor de tiempo de vida del cliente y una merma de las relaciones con los clientes; además de provocar que tu marca tenga mala imagen.
Las plataformas de datos de clientes (CDP) son cada vez más necesarias para ofrecer experiencias oportunas y relevantes —especialmente en la era de los datos sin cookies— y el mercado fue testigo de una explosión de opciones. Sin embargo, muchas no cuentan con la habilidad esencial de tanto actualizarse en tiempo real como conectar con los clientes de formas significativas. Algunas son compatibles con una conectividad y una recopilación de datos básicas, pero tienen herramientas de resolución de identidades rudimentarias, lo que te deja con perfiles de clientes incompletos. Otras no pueden cumplir casos de uso de marketing avanzados como las campañas multicanal, la segmentación compleja y la personalización en tiempo real. Por último, muchas presumen de cientos o incluso miles de integraciones directas con los destinos, mientras que, en realidad, muchas de ellas se mantienen de manera insuficiente o son plantillas del lado del cliente.